Publicado en El Espectador, Enero 11 de 2018
CNN (2018). "Read Oprah Winfrey's rousing Golden Globes speech". CNN Entertainment, Jan 8
HSB (2017). "¡Miss Perú 2018! cambió las medidas de las reinas por escandalosas cifras de feminicidio" HSB. Noticias.com. Oct 31
Mancilla, Alejandro (2018) "Time's Up - El tiempo de los acosadores se ha terminado" Vanity Fair, Ene 3
Rubio, Mauricio, (2011). "Feminismo versus flominismo". Blog Personal, Junio 3
Rubio, Mauricio (2011). "El acoso sexual en el trabajo". La Silla Vacía, Ago 16
Urias, Vienna (2015) “The 10 Best Feminist Quotes of 2015”. Ms Magazine, Dec 18
Las
feministas tradicionales pretenden que el revolcón contra el acoso sexual en el
trabajo se les debe a ellas, cuando en Colombia lo ignoraron hasta hace poco.
Camille
Paglia anota que “durante décadas, el feminismo rechazó Hollywood, los símbolos
sexuales y las revistas de moda. Hoy las mujeres jóvenes no tienen ningún
problema en reconciliar la belleza con las ambiciones de una mujer profesional.
Ahora nadie piensa que una mujer tenga que usar pantalones y no depilarse las
axilas pareciendo un gorila”.
La mayor
revuelta femenina en décadas la lideran quienes fueron menospreciadas por ser objetos
sexuales: actrices, cantantes, modelos y trabajadoras de la industria del
entretenimiento, el opio de la clase media, la infiltración del capitalismo en
el hogar que alienaba a las mujeres y las condenaba a la maternidad y al
consumo. Ahora, las estigmatizadas reinas de belleza proclaman “mis medidas son
82 feminicidios y 156 tentativas". Cristina Pedroche, española famosa por
salir en TV cuasi desnuda, ilustra los nuevos tiempos: “mi vestido es
superfeminista porque llevándolo defiendo la libertad de la mujer”.
Para el
diccionario Webster “feminism” fue la palabra del 2017, pero las nuevas protagonistas
no tienen nada que ver con las contestatarias de antes, las femiprogres. Son su
antítesis: en atuendo, educación, ideología, agenda, estrategias y capacidad de
acción. Puede que se apropien del término, pero no pretenden cambiar el sistema
capitalista patriarcal por una utopía. Buscan reformar su entorno cercano y
descabezar acosadores conocidos; imponer sanciones, no cambiar mentalidades. No
estudian historia para entender las raíces culturales del acoso sexual. Las
preocupa su ámbito inmediato, cotidiano y, obviamente, lucir una figura tan
cuidada como su vestimenta: son las femininas.
La crisis
estaba anunciada. Katy Perry, cantante y mujer del año 2012 para Billboard, negó ser feminista aclarando
que confiaba en el poder de las mujeres. Rowan Blanchard, actriz de 14 años,
anotó que “las feministas olvidan que feminismo significa igualdad”. De eso tan
escueto, no de lecturas, reflexiones
ni manifestaciones, vienen las femininas.
Las
femiprogres locales aportaron poco al #MeToo global: no convencieron
denunciantes y ningún gran acosador colombiano sufrió escarnio público. También
pelaron el cobre. Sólo Jineth Bedoya y algunas periodistas de derecha apoyaron
a las víctimas de los ataques sexuales más serios. Una femielitista opina que
“la violencia sexual contra las mujeres en la guerrilla es idéntica a la que
sucede en la universidad, en los medios, en el gobierno, en las empresas
privadas y dentro de las familias”. Semejante lucidez y sentido común ilustran
por qué el dogmatismo nunca tuvo respaldo masivo. Siguen pensando que todos los
avances en la igualdad surgieron de diatribas amargas; equiparan su idealismo
al pragmatismo de las feministas anteriores a ellas, las que lograron voto y
acceso a la educación. Ratificaron su obsesión por el lenguaje incluyente, la
ideología progre y la sororidad infalible, sin apertura a la crítica ni interés
por reformas puntuales. Acostumbradas a nunca contradecir a quien se declara
feminista, ni siquiera para filtrar incoherencias, no han calibrado que fueron
desplazadas por femininas de la farándula, la publicidad y la moda: los
sectores que consolidaron los “estereotipos de género” que las desvelan, nada
menos.
Lo que viene
es incierto, pero caben unas conjeturas. Los empresarios del espectáculo, bajo
la batuta de Hollywood, ensamblarán una retórica feminista sencilla y
pasteurizada, porque les conviene. Así lo demuestran los contundentes
descabezamientos de gurús en la industria y el tratamiento sin enredos que ya
tiene la diversidad sexual en los guiones cinematográficos y televisivos. La justicia
gringa hará correctivos por despidos varoniles injustos. Con algoritmos tipo
Netflix, por consideraciones comerciales, el puritanismo quedará controlado. El
nuevo discurso tendrá brillo, pantalla, megáfono, auditorio masivo con difusión
ligera, comprensible y algo de humor. O sea lo que nunca ofrecieron las
femiprogres, que seguirán divagando para una élite, adoctrinando incautas y con
ejecución precaria. Desconcertadas, preguntándose por qué son menos populares
que las actrices, buscarán construir a las carreras vínculos entre Simone de
Beauvoir y Oprah Winfrey. Algunas oportunistas harán coaching en los reinados
para adornar la belleza de las candidatas. El mensaje simple y masticado, como
de Disney, que feminismo equivale a igualdad sin acoso, vendrá empaquetado en
películas, series, telenovelas y canciones pegajosas.
Conceptualmente,
la próxima ola feminista será liderada por pensadoras y académicas rigurosas
que ya desafían certezas, plantean dudas y construyen conocimiento:
científicas, humanistas, abiertas al diálogo y la crítica, empíricas apoyadas
en trabajo de campo minucioso. Resurgirán feministas europeas no mojigatas que
matizarán la figura de la mujer víctima total con la femme fatale. La medicina, las neurociencias y sla biología entrarán
en los debates sobre género desplazando ridiculeces como el prefijo cis para
las mujeres. Sin que mermen sus derechos, las trans por fin entenderán que el
lema “la mujer no nace, se hace” era una metáfora.
Bronner, Sasha (2015). “Rowan Blanchard: ‘White Feminists Forget That Feminism Means Equality’”, HuffPost, Oct 28
CNN (2018). "Read Oprah Winfrey's rousing Golden Globes speech". CNN Entertainment, Jan 8
HSB (2017). "¡Miss Perú 2018! cambió las medidas de las reinas por escandalosas cifras de feminicidio" HSB. Noticias.com. Oct 31
Mancilla, Alejandro (2018) "Time's Up - El tiempo de los acosadores se ha terminado" Vanity Fair, Ene 3
Rubio, Mauricio, (2011). "Feminismo versus flominismo". Blog Personal, Junio 3
Urias, Vienna (2015) “The 10 Best Feminist Quotes of 2015”. Ms Magazine, Dec 18
Vicente, Álex (2018) “Cien artistas e intelectuales francesas contra el “puritanismo” sexual”. El País, Ene 9